Esta Finca es un lugar extraordinario, de un paisaje
aún más impresionante. Ningún hombre había
puesto sus manos a trabajar sobre estos suelos. Los
antiguos productores de Paraje Altamira trazaron
la frontera donde se los permitió la piedra, y
cultivaron históricamente las zonas más planas y
menos pedregosas, más cercanas al pueblo de La
Consulta, porque avanzar hacia el sur y hacia el
oeste significaba adentrarse en el corazón de la
parte más alta del abanico aluvial del río Tunuyán.
Significaba, entonces, la lucha con la piedra.
Nosotros llegamos allí por intuición, impulsados
por el paisaje. Y encaramos esa lucha, con energía,
pero también con la humildad de saber que le
hacíamos frente a algo infinito. Fueron más de mil
Fueron más de mil camiones llenos de piedra que
debimos mover, para hacerle espacio a la vid. Fue
el primer paso de un camino desafiante. Porque
cultivar este viñedo implica estudiar, trabajar,
conocer cada hilera, cada piedra. Explorar
incansablemente su enorme diversidad para poder
interpretarla a través del vino. Los vinos de Finca
provienen de viñedos particulares de la familia,
100%.
Finca Piedra Infinita es un Malbec, que está
construido con una cuidadosa selección de parcelas
de la finca que crecen sobre los suelos menos
profundos, tan abundantes en esta finca. Es un
auténtico vino
